Ok, hablemos de la pizza... simplemente es la reina de las recetas! y por ello es súper popular en todo el mundo. La masa es básica pero atómica. Lo mejor es que puedes ponerle lo que quieras... como: salsa, quesos, verduras, carnes, todo lo que se te ocurra! Personalmente, creo que es perfecta para cualquier ocasión y lo mejor de todo es que hoy aprenderás a hacerla en casa.
En esta receta nos centraremos en lograr una masa perfecta y fácil de hacer. Así que, vamos a hacer nuestra propia pizza casera. Prepárate para sumergirte en la magia de la pizza.
Ingredientes:
660g de harina de fuerza
4 g de levadura
15g de aceite de oliva
2 cucharaditas de sal (10g)
389 g de agua tibia (37 grados)
Preparación:
En un recipiente mediano, mezclaremos la levadura con aproximadamente 3 cucharadas de agua y una cucharada de harina, integrándolos bien. Reservaremos esta mezcla cubriendo el recipiente con una servilleta durante 5 minutos.
Pasado el tiempo, en un bowl agregaremos todos los ingredientes: harina, aceite de oliva, sal, agua y la mezcla de levadura que habíamos reservado anteriormente. Comenzaremos a amasar ya sea a mano o en una amasadora, pero ten en cuenta que esta masa es pegajosa, por lo que se recomienda usar la máquina para mayor comodidad. El tiempo de amasado es de 5 a 7 minutos en la máquina o de 8 a 10 minutos a mano.
Una vez bien amasada, taparemos la masa con plástico o un paño y la dejaremos leudar durante 20 minutos. Luego, haremos 3 pliegues en la masa, desde un extremo hacia el otro. Después de hacer estos pliegues, dejaremos leudar la masa por otros 20 minutos. Repetiremos este proceso un total de 3 veces más, incluyendo los pliegues y los leudados, lo que nos dará un total de 4 veces en total.
Una vez hechos todos los pliegues, humedeceremos la masa con un poco de aceite y la llevaremos al refrigerador durante toda la noche. Al día siguiente, sacaremos la masa del refrigerador y la dejaremos leudar por otras 2 horas a temperatura ambiente. Luego, dividiremos la masa en 5 partes de aproximadamente 222g cada una y las dejaremos leudar durante al menos 1 hora.
¡Y listo! Ahora tienes la masa perfecta para preparar las mejores pizzas caseras que jamás hayas probado. Solo te falta estirarla y cocinarla.
Te recomiendo ver el siguiente video para tener una mejor idea de todo el proceso. ¡Disfruta de tus deliciosas pizzas caseras!
TIPS:
A la hora de hacer los pliegues, asegúrate de tener tus manos ligeramente humedecidas. De esta manera, evitarás que la masa se pegue y obtendrás una textura suave y manejable.
Durante la fermentación en el refrigerador y a temperatura ambiente, esparce un poco de aceite de oliva por la parte superior de la masa. Esto ayudará a evitar que se forme una costra seca, manteniéndola tierna y lista para ser moldeada.
Para obtener un resultado óptimo, te recomiendo utilizar harina de fuerza en lugar de la harina común. La harina de fuerza aportará mayor elasticidad y estructura a la masa, logrando una pizza más esponjosa y deliciosa.
Datos Random:
La harina de fuerza es ampliamente utilizada en todo el mundo panadero debido a su mayor contenido de gluten (proteínas). Esta característica es fundamental para lograr una masa elástica, ideal para el tipo de masa que buscamos obtener, como la de las deliciosas pizzas.
Además, su nombre, "harina de fuerza", proviene de su mayor capacidad para resistir y retener los gases liberados durante la fermentación. Gracias a esta cualidad, la masa se mantiene más ligera y esponjosa, lo que es fundamental para crear una pizza de calidad.
En resumen, al utilizar harina de fuerza en nuestra receta de pizza, aseguramos una masa con la textura perfecta. Así que, si deseas preparar una pizza casera que deslumbre a todos, esta es la elección acertada.